jueves, 15 de septiembre de 2011

Humano

La deshumanización es el peor de los males que he conocido. A partir de ello cualquier cosa es posible. Solo voy a dar dos ejemplos.
Muchas veces actos aberrantes se realizan partiendo desde la base de que el otro no es una persona sino un objeto, un monstruo, algo cosificado, desvitalizado. Se puede matar, torturar a esa cosa, porque es una cosa. No es humano como los demás. Por supuesto el nazismo ejemplifica claramente esta variante. A esto apunta el terrorismo.
En otros casos, la deshumanización puede ser más cotidiana. En la televisión diariamente se transforman las vidas humanas en cifras: los que están por debajo de la línea de pobreza, los que mueren en accidentes de tránsito, las bajas de una guerra, los muertos en un atentado. Esto genera la ilusión de que se está hablando de algo frío, aunque en realidad cada uno de esos números es una vida humana, única e irreemplazable. La vida no es una estadistica.

Por eso pido que todos estemos alertas ante este mal humano. Estemos alertas a cada comentario, cada gesto, y tomemos la responsabilidad de decir algo, de hacerle dar cuenta al otro el camino que esta tomando.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

La vita e una catena che non si puo scatenar

A veces me resulta inevitable pensar en que en determinadas situaciones aparecen señales. Casualidades que no lo son. Coincidencias extrañas, que si no fuera porque me pasan seguido serían extraordinarias. ¿Hay un destino por seguir?
Hoy voy al gimnasio y empiezo una clase de pilates. La profesora tenía una remera igual a una que tengo yo, exacta (all you need is love). Esto me hizo acordar al día en el cual compre la remera. Había estado navegando por internet un viernes a la noche, y ya no me acuerdo ni como, termine buscando diferentes imágenes con la frase "all you need is love". Al día siguiente fui a comprar ropa con una amiga y en un negocio vi esta remera, exactamente igual a una imagen que había descargado el día anterior. Por supuesto la compré.
Recuerdo otras recientes. Una madre con un niño acuden al centro de salud. Ese mismo día corrijo un escrito mio, y busco en internet el nombre de una colega. Mientras escribo, aparece como primera referencia una persona cuyo apellido es igual a la familia del centro de salud (un nombre para nada común que no había escuchado antes).
Dejo aquí esta inquietud, que da para mucho mas, pero mis baterías dan para mucho menos, y debo ir a dormir.

lunes, 5 de septiembre de 2011

El camino hacia la espiritualidad

Vivimos en una era velocista, apurada. Se corre rápido, pero se deja poca huella. Fast food, fast love, un rapidito y a seguir. No podemos enfermarnos, no  podemos estar sin hacer nada sin que sea un pecado, o por lo menos aparezca una culpabilidad por el tiempo de ocio. "No tengo tiempo de ver un programa en la tele, me veo uno con videos de varios, y si no puedo ver algo lo veo cuando puedo en internet". "No me voy a poner a leer sobre filosofía, miro algo en Wikipedia y listo".
Todo conocimiento masticado sabe mejor. Hasta la espiritualidad masticada sabe mejor. Por eso experimentamos el auge de la espiritualidad de bolsillo. Un proverbio chino por acá, un mantra hindú por otro lado, la fábula del zorrito que se comió al conejo y alguna canción popular con tintes optimistas que hable de la vida y la felicidad. Un combo, que no sabemos si viene con papas fritas o con aros de cebolla.
Pero así como aunque lo diga la propaganda, un celular o un auto no te van a hacer mejor persona, ni más interesante, lindo, exitoso, lo que sea, leer lo que dice un tipo sobre Buda no te va a dar tranquilidad tampoco. Las frases hechas van y vienen, hasta que en algún momento significan algo para nosotros, nos identificamos y las hacemos propias.
Yo creo que en el vértigo actual, no hay posibilidad del espiritismo express. Si estamos girando en una calesita, hay que poder bajarse, y luego de que se nos pase el mareo, podremos quedarnos quietos, y desde allí mirar hacia la calesita, que sigue girando al lado nuestro, y hacia adentro de nosotros mismos.
Sin embargo, de todo esto veo algo positivo. Esta época actual también nos brinda la oportunidad de estar abiertos a otras sensaciones, vivenciares, bienestares. Muchas veces esta pseudoespiritualidad es el camino de muchos para llegar a otros modos de ver la vida.